Elige bien a “tus chicas de confianza” y todo saldrá según lo previsto
Siempre se ha dicho que “quien tiene un amig@, tiene un tesoro” y en las bodas ese tesoro tiene un sitio especial. Por ello, hoy queremos dedicar nuestro rincón semanal a las damas de honor.
Seguro que pensabas que era una tradición puramente americana, pero lo cierto es que su origen se encuentra en Europa en la Edad Media. No obstante, el hecho de que las damas de honor sean mujeres adultas, y no niñas, es propio de las religiones protestantes. De ahí que sea muy popular en regiones de Inglaterra mientras que en España, que es mayoritariamente católica, sea más usual los pajes.
Aunque mucha gente crea que es un “elemento más”, ellas tienen una función en el evento. Ayudar a la novia antes y durante la boda, por lo que además de un halago es una responsabilidad.
¿Ayudar en qué?
- Elegir el vestido, peinado y complementos.
- Elegir la temática y estilo de decoración.
- Preparar las invitaciones.
- Preparar los detalles de los invitados.
- Ayudarle a vestirse el día de la boda.
- Ayudarle a estar tranquila en todo momento.
- Acompañarle de camino al altar abriendo el cortejo.
- Asistirle cuando necesite ir al baño, retoques de maquillaje, etc.
- Ayudarle a entregar los detalles de los invitados…
Esta lista es solo orientativa ya que en la práctica la novia puede requerir ayuda solo el día D.
Aunque, en principio, en la ceremonia solo se encargan de abrir el cortejo, a veces son invitadas a participar leyendo un escrito o portando las arras o el ramo.
En cuanto al número de damas de honor debemos decir que es algo que lo decide la novia, pero no olvides que cuantas más sean, más opiniones habrá y más difícil puede llegar a ser tomar una decisión. También ten en cuenta el número de invitados que asistan, ya que si son pocos, puede resultar desproporcionado llevar un séquito de chicas abriendo el cortejo.
¿Vestidas iguales o no? Pues eso también lo decide la novia. No hay un protocolo establecido al respecto, pero te aconsejamos que, puesto que en España aún no es muy común la presencia de damas de honor, éstas lleven una vestimenta sencilla y elegante. Los vestidos ligeros y con mucha caída suele ser la mejor opción para ellas… Pero ¡ojo! No olvides que deben ir al estilo de tu boda y tuyo.
Ya sabemos sus funciones, hemos decidido la cantidad y hemos elegido el vestido ¿Qué toca ahora? Pues darle su sitio en la ceremonia. Cuando llegan al altar abriendo paso a la novia es preferible que se sienten en segunda fila o en un lateral, si es en una iglesia, o de pie al lado de los novios si es civil, ya que al ser más corta no habrá problema en que pasen un ratito de pie acompañando a la novia.
Si os ha gustado este post y queréis saber más detalles de las damas de honor, dejadnos un comentario y ampliaremos la información más adelante.
Os esperamos la próxima semana y… ¡Feliz feria de Abril’18!
GRACIAS